El propósito es aquello que mueve a las empresas, que les marca un horizonte y que, a la vez, les define una perspectiva desde la cual tomar decisiones estratégicas y trascendentales.
¿Te has preguntado alguna vez para qué existe tu emprendimiento? Normalmente las personas que están empezando en el camino de emprender saben qué son, qué hacen y, en el mejor de los casos, cómo lo hacen, y aunque todo esto es muy importante tenerlo claro, el para qué, o sea el propósito, es el que te hace diferente a tus competidores y orienta tu estrategia y tus objetivos empresariales.
El propósito de las empresas es aquello que sustenta su existencia: Un problema que resuelve, una necesidad que suple, un Para qué relevante para el mundo, que evidentemente está lejos de enmarcarse sólo en un interés económico, pues el dinero llega como recompensa cuando el propósito se cumple, es una consecuencia de, más no un fin en sí mismo.
TU PROPÓSITO EMPRESARIAL NO SON TUS OBJETIVOS
Es común confundir los objetivos con el propósito de las empresas. Los objetivos son metas concretas que pueden cumplirse con acciones determinadas, medibles y mutables en el tiempo, que al final siempre deberían estar encaminadas a cumplir el propósito. Es decir, los objetivos sirven para que la empresa cumpla su propósito.
(Gráfico explicativo)
¿CÓMO DESCUBRIR EL PROPÓSITO DE LA EMPRESA?
Para encontrar el propósito es necesario cuestionarse y reconocerse. Esto, aunque puede ser algo confrontante, es un ejercicio que amplía la mirada y permite aumentar tu objetividad y por lo tanto tu pensamiento estratégico.
Trata de identificar a quién puedes ayudar con lo que haces y hazte un experto en las necesidades que tienen, pregúntate por tus motivaciones, por las razones que te llevan a tomar tus decisiones, define aquella huella que quieres dejar, construye la historia que quieres contar para ser recordado.
Conoce el mercado, compárate con tu competencia y vuélvete a preguntar ¿para qué existe mi empresa?, ¿cuál es el aporte que estoy haciendo con mi negocio a la vida de las personas o al mundo?, ¿cuál es el impacto que quiero generar?, ¿qué potencial tiene tu empresa de convertirse en la solución de un problema relevante para un público determinado?
LA IMPORTANCIA DE TENER UN PROPÓSITO EN LAS EMPRESAS
Las empresas más exitosas, que tienen más trayectoria y un verdadero reconocimiento empresarial, son aquellas que tienen claro su propósito y tienen definida su manera de crear valor a las personas. Por eso es que hacen la diferencia, porque trascienden los resultados económicos y se proponen aportar, desde sus posibilidades y capacidades, a la construcción de realidades diferentes.
Esto ocurre porque cuando todas las personas que intervienen en los procesos de la empresa tienen claro cuál es el propósito empresarial, y este se conecta con su individualidad, pueden sintonizarse, enfocarse y motivarse mucho más, teniendo claro que su función, por pequeña que sea, está aportando al cumplimiento de un propósito superior. Es allí cuando existe una coherencia entre el ser individual y el colectivo.
Y es esa coherencia y ese equilibrio entre todas las partes involucradas y el propósito de las empresas, las que elevan el potencial de acción del sistema. Cuando hay un propósito trascendental e inspirador que impulsa tu negocio, adquieres una fuerza espiritual que permite que tus ideas se vuelvan posibles y el crecimiento se vuelva realidad.
¿TE GUSTARÍA DESCUBRIR EL PROPÓSITO DE TU EMPRESA Y CONSTRUIR UNA ESTRATEGIA DE CRECIMIENTO EN FUNCIÓN DE ÉSTE?